El delantero uruguayo abandonó Europa para tener un segundo ciclo con la camiseta del “Millonario” y retirarse del profesionalismo en Núñez.
Enzo Francescoli es uno de los grandes ídolos que tiene River Plate en su rica historia. Los motivos son claros: tenía un talento extraordinario, aportó goles, asistencias, buenas actuaciones y títulos. Además, por si fuera poco, abandonó Europa para regresar a la institución, seguir haciendo crecer su palmarés y colgar los botines con “La Banda”. Esos gestos no se olvidan.
El día que Enzo Francescoli volvió a River Plate
El delantero uruguayo había jugado en el conjunto “Millonario” entre 1983 y 1986, cuando fue adquirido por el Racing Club de France. Había mostrado un grandísimo nivel en el club y era, con diferencia, uno de los mejores futbolistas de Sudamérica. Esto, obviamente, le alcanzó para ganarse el cariño de la gente y dejar un buen recuerdo.
Sin embargo, lejos de conformarse con haber ganado un sólo campeonato local, en julio de 1994 decidió regresar a Núñez. Con 33 años de edad, le dijo adiós al Torino de Italia y abandonó Europa. Y qué bien que hizo: celebró 4 títulos locales más y llevó al equipo a ganar la segunda Copa Libertadores en su historia.
El impacto de su regreso fue inmediato: River Plate se coronó campeón del Torneo Apertura 1994 de manera invicta y Enzo Francescoli fue el goleador del torneo con 12 goles. La readaptación al fútbol argentino no le costó nada, aunque sí tuvo que sufrir un mediocre año en 1995: allí la institución no pudo ganar nada.
De cara a 1996, se retiró de la Selección de Uruguay y se enfocó 100% en el club. Y tuvo premio. El atacante lideró a un grupo de jóvenes a conquistar la Copa Libertadores después de algunos años de decepciones. Si bien Hernán Crespo fue el máximo artillero del equipo con 10 tantos, él tuvo un nivel altísimo y marcó 6 dianas.
“Saldé una deuda conmigo mismo”, confesó Enzo Francescoli después de levantar el trofeo en El Monumental ante más de 90 mil espectadores. Claro, le había tocado irse de River a mediados de 1986, justo antes de que el elenco de Héctor Veira conquiste la primera Libertadores.
Para completar su exitoso regreso a Núñez, el uruguayo se hizo con el tricampeonato: ganó el Apertura 1996, Clausura 1997 y Apertura 1997; además, también festejó la Supercopa Libertadores 1997 frente a San Pablo. De esta manera, Enzo se dio por satisfecho y anunció de manera oficial su retiro.
Sus números en River Plate no estuvieron nada mal: marcó 136 goles en 236 partidos, lo que le da una efectividad del 58%. Ganó 5 campeonatos locales, 1 Copa Libertadores y 1 Supercopa Sudamericana, la gran mayoría de estos títulos fueron en su regreso. Logró muchas distinciones, pero vale la pena resaltar cuando fue reconocido como “Mejor jugador veterano del mundo” en 1995 y 1996.
