Néstor Ortigoza le envió un fuerte mensaje a aquellos futbolistas que están pensando más en irse que en quedarse en el “Ciclón”.
San Lorenzo de Almagro sufrirá algunas bajas importantes en este mercado de pases. Si bien los hinchas están muy ilusionados con el proyecto de Leandro Romagnoli y el equipo afrontará la fase eliminatoria de la Conmebol Libertadores en el segundo semestre del 2024, la realidad obliga al club a vender a algunos jugadores de jerarquía para levantar distintas inhibiciones. Por eso, el “Pipi” tendrá que arreglárselas como pueda en el futuro cercano.
Futbolistas como Adam Bareiro y Agustín Giay tienen un pie afuera de Boedo: ambos, gracias a sus extraordinarios rendimientos, son pretendidos por otras instituciones y tienen serias chances de ser transferidos. Y, teniendo en cuenta la intención mostrada por el paraguayo por irse, Néstor Ortigoza, dirigente, aprovechó para enviar un fuerte mensaje al resto del plantel. La postura es clara.
La postura de San Lorenzo con los jugadores que piensan en irse

“Si Bareiro cree que cumplió un ciclo y tiene que emigrar, así será. Que se quede el que se quiera quedar. ¿Hasta dónde podemos comprometernos a cumplir si tal vez no le podemos pagar?”, apuntó con contundencia el ex mediocampista en ESPN. De esta manera, dejó en claro que le mostrarán la puerta de salida a aquellos futbolistas que estén más enfocados en una transferencia que en trascender con la camiseta azulgrana.
Más adelante, sobre el paraguayo, completó: “No llegó nada por Bareiro pero San Lorenzo tiene que vender por las inhibiciones. Si cree que cumplió un ciclo y quiere que emigrar, evaluaremos las ofertas que lleguen”.
Ortigoza aclaró su pelea con el DT de la séptima división

Por otra parte, “Orti” aclaró el altercado que tuvo con Hernán San Martín, entrenador de la Séptima División de San Lorenzo. “Fue una discusión acalorada pero no hubo piñas, no se trata de eso. Hay 2 pilares fundamentales: el respeto y la educación“, mencionó. ¿Por qué se dio el cruce? Porque el dirigente le llamó la atención a los jóvenes para que sigan con la línea marcada por el club.
“No me gusta que los chicos viajen y que la categoría más grande le pegue a los chicos más chicos, no me gusta. El chico cuando viene del viaje tiene que contarle al papá que tiró una pared, un centro, que ganaron y no que le pegaron 10 piñas en la cabeza. Era un llamado de atención y poner el foco en los chicos. El chico que no estudia no juega en San Lorenzo. Es una línea del presidente para abajo. Les tenemos que inculcar el estudio, el respeto, la educación, el compromiso. No me gusta que un chico haga un gol en Inferiores y se lo festeje al técnico rival“, sentenció.