¿Cuál es el futuro del capitán de la Selección? Paolo Guerrero pide con emotivo comunicado las disculpas al público trujillano.
El reconocido futbolista peruano, Paolo Guerrero, emitió un comunicado este sábado para explicar su sorpresiva decisión de rescindir su contrato con el club Vallejo, manifestando que la seguridad y el bienestar de su familia son su principal prioridad.
En el comunicado, Guerrero revela que su negativa a jugar en Trujillo, a pesar de haber firmado un contrato con el equipo local, se debe a amenazas de muerte y mensajes extorsivos dirigidos a su familia. “Debo proteger a mi familia”, afirma el capitán de la selección peruana, mencionando que las amenazas comenzaron desde el momento en que formalizó su vínculo con el club Trujillano.
La difícil situación que enfrenta Guerrero no es ajena a la tragedia que vivió en 2019, cuando su sobrino perdió la vida resistiendo un intento de robo. El dolor de esa pérdida aún persiste en la familia Guerrero, y el jugador no desea exponer a sus seres queridos a un riesgo similar.
“En mi decisión de rescindir mi contrato laboral y solicitar mi desvinculación ha primado la vida, la seguridad y la tranquilidad de mi familia”, sostiene Guerrero en el comunicado. Además, destaca que la denuncia ya está en manos de las autoridades, quienes fueron informadas desde el principio de las amenazas que estaba enfrentando.
El mensaje de Guerrero no solo se enfoca en su situación personal, sino que busca generar conciencia sobre la inseguridad que afecta a muchos peruanos. “Deseo de corazón que la exposición pública de mi problema ayude a que se implementen medidas que permitan que quienes también los padecen, pero no tienen visibilidad pública, no sean víctimas de la inseguridad y de la violencia”, expresó.
Cueva, un amigo solidario en medio de la crisis
En una parte destacada del comunicado, Guerrero agradece a Christian Cueva, apodado ‘Cuevita', quien intentó ayudar investigando la veracidad de las amenazas a solicitud del propio Paolo. El futbolista hace pública su disculpa hacia Cueva y su abogado por cualquier malentendido que pudiera haber surgido durante este proceso.
El mensaje final de Guerrero va dirigido al pueblo de Trujillo, expresando su esperanza de que pronto lleguen días mejores y de que nadie más se vea amenazado por vivir en esa localidad. Agradece a los habitantes de Trujillo y a sus amigos por el apoyo brindado, subrayando que la seguridad no debe ser exclusiva para él, sino para todo el pueblo trujillano.
En medio de esta situación, Paolo Guerrero demuestra valentía al poner en primer plano la seguridad de su familia, enviando un mensaje contundente sobre la necesidad de garantizar un entorno seguro para todos los peruanos.
