Universidad de Chile pretendió a una exfigura de Colo-Colo cuando volvía del extranjero, y ahora el jugador aclaró por qué dio un rotundo no.
La rivalidad entre Colo-Colo y Universidad de Chile se revitalizó con la victoria laica sobre el “Cacique” por la cuenta mínima, donde rompieron una racha de más de 20 años en que no lograron vencerlos en el Estadio Monumental. Así también lo viven los jugadores, algunos que son hinchas del mismo equipo que defienden y se abanderan en los partidos.
Un caso de estos es el del exdefensor “Albo”, Sebastián Toro, quien recientemente volvió a la actividad de su retiro para ser parte de San Antonio Unido, club que preside Esteban Paredes, histórico jugador que rompió el récord a máximo goleador de la Primera División de Chile. En Macul, “Seba” fue canterano, conquistó tres títulos (2008-C, 2009-C y 2014-C), más tarde, emigró al extranjero.
El zaguero chileno rompió su silencio con respecto a un posible fichaje que pudo darse después de su paso por el extranjero, cuando vuelve de Junior de Barranquilla donde era dirigido por Giovanni Hernández, otro recordado del club. La “U” intentó firmar a Toro en ese entonces, pero, la respuesta fue un rotundo no y el jugador explicó sus motivos.

Las confesiones de Sebastián Toro: “Soy muy hincha de Colo-Colo… Iba a la barra”
“Cuando llegué de Colombia, luego de mi paso por Junior de Barranquilla, a mí me contactaron desde la U, ya que querían que me uniera a ellos“, relató Sebastián Toro a En Cancha. “Como soy yo, era complicado e imposible. Más que por plata o distintos motivos, soy de una sola línea y eso no me permitía ir a la U, porque soy muy correcto a mis principios, más encima, soy muy hincha de Colo-Colo“, continuó.
Además, señaló que sobre todo para los canteranos era compleja la decisión. “Un jugador formado aquí puede que le sea muy complicado ir a la U, lo mismo en el caso contrario, no es imposible, pero, sí demasiado difícil por el lazo que uno forma con la institución“, aseveró Toro.
Incluso, aseguró que cuando aún era menor de edad y no participaba en el equipo, los iba a alentar como cualquier fanático: “Desde los 13 o 14 años yo iba a la barra, desde siempre. Siempre me he sentido representado por el equipo y, ahora, a mis hijos les inculqué la pasión por Colo-Colo“.