Universidad Católica está sin estadio desde hace unos cuantos meses y esto es porque su mítico San Carlos de Apoquindo está siendo remodelado. Pero lo increíble es que su localía se modificará en el segundo semestre.
En agosto de 2022, Universidad Católica y todos sus aficionados se despidieron del estadio San Carlos de Apoquindo. Fue en un partido por Copa Chile que terminó siendo muy emotivo porque el recinto jamás volverá a hacer el mismo.
La construcción del nuevo escenario es realmente millonaria y tiene la particularidad de que se tratará de uno de los estadios más lujosos de Sudamérica. Sin dudas, este lugar también será el mejor para la práctica de fútbol dentro del país.
La localía de Universidad Católica
El verdadero problema que salió a la luz fue que “Los Cruzados” no tenían un lugar donde jugar sus partidos. Esto es porque el estadio Nacional también estaba totalmente cerrado debido a que se estaba reacondicionando para los Juegos Panamericanos de Santiago 2023.
Es por eso que todos los caminos apuntaron directamente al estadio Santa Laura, propiedad de Unión Española. Y fueron muchos los encuentros que se desarrollaron en este lugar, ya que no solamente estaban jugando “Los Hispanos”, sino que también Universidad de Chile jugaba sus partidos en esta ubicación.

Por lo pronto, el cuadro precordillerano no podrá volver a utilizar su casa nueva hasta 2025 y por eso los dirigentes tienen nuevos planes para el futuro. Por lo pronto seguirán utilizando el Santa Laura durante los próximos partidos de local.
Pero todo cambiaría en septiembre, ya que existe la posibilidad de que Universidad Católica desarrolle algunos partidos en el estadio Nacional. Y tendrán un buen recuerdo, ya que el último fin de semana triunfaron en un Clásico Universitario inolvidable. Así lo informó el comunicador Marco Escobar y la recepción de los hinchas fue más que positiva.
La UC en el Ñuñoa
Si bien ha afrontado partidos como visitante y finales como neutral, “La UC” no hace de local en este recinto hace más de una década. Todo ocurrió en julio de 2011 y fue en un duelo por la Copa Chile contra Colo Colo.
La historia culminó sin goles, pero es hasta el día de hoy que los aficionados de “La Franja” no se volvieron a sentir locales en dicho estadio.