Universidad de Chile quiere dar el gran golpe en 2025 y volver a tener un año como el que acaba de culminar. Pero sabe que no será suficiente con el plantel que tiene actualmente, ya que tendrá muchos más partidos con su retorno a la Copa Libertadores.
El mercado de fichajes continúa en el fútbol chileno y Universidad de Chile quiere seguir sumando refuerzos de cara a la intensa temporada 2025 que tendrá. Por el momento los únicos nombres nuevos que tendrá Gustavo Álvarez son Julián Alfaro y Gonzalo Montes.
El primero llegó directamente desde Magallanes después de varias semanas con su nombre rondando los pasillos del CDA. Por otro lado, el segundo jugador fue dirigido por este entrenador en Huachipato. Justamente otro viejo conocido del orientador podría estampar su firma en las próximas horas y ser la tercera incorporación.
Universidad de Chile incorporará a un jugador del fútbol argentino
Mientras muchos futbolistas cruzan la frontera desde Chile a Argentina, hay algunas excepciones que vienen al fútbol chileno. Y casualmente algo así beneficiará a Universidad de Chile para repatriar un jugador y que se transforme en el tercer refuerzo del club.
Se trata ni más ni menos que de Javier Altamirano, mediocampista que fue campeón en 2023 con Huachipato de Gustavo Álvarez jugando seis meses. Se encontraba en los Acereros desde 2017, pero actualmente juega para Estudiantes de La Plata desde el invierno de 2023.
De todos modos, después de protagonizar un episodio que puso en vilo a todo el fútbol sudamericano, ha tenido pocas oportunidades. Estuvo casi seis meses sin jugar y no pudo demostrar todas sus habilidades en el Pincha de La Plata.
Altamirano cambiará de club y llegará a Universidad de Chile por un préstamo de un año con cargo. Cuando termine esta cesión, La U tendrá la oportunidad de hacer uso de la opción de compra que le otorga el equipo argentino.
El día que Javier Altamirano se descompensó en pleno partido
Al poco tiempo de su debut y marcar su primer gol con esta camiseta, Javier Altamirano protagonizó un hecho que asustó a todos en pleno partido entre Estudiantes y Boca. Fue mientras corría la primera etapa y él en un momento se derrumbó en mitad de cancha y comenzó a convulsionar.
Posteriormente pasó internado un buen tiempo hasta que paulatinamente fue recuperándose de una trombosis, mientras el club le realizaba pruebas para saber en qué momento podría retornar a la práctica profesional.
El 5 de noviembre integró el banco de suplentes ante San Lorenzo y una fecha más tarde jugó sus primeros 28 minutos desde el episodio. Lamentablemente finalizó el año con apenas 15 partidos disputados.