Colo Colo tardó casi un mes en sellar a Javier Correa, su primer refuerzo. Pero ahora la gran incógnita es como puede ayudar a que el ataque del equipo dirigido por Almirón sea más eficiente.
Javier Correa firmó su contrato, fue presentado con la camiseta de Colo Colo puesta y ya se entrena bajo las órdenes de Jorge Almirón. Es el primer y por ahora único refuerzo del equipo y es importante analizar sus virtudes.
Lo primero que hay que decir es que los últimos meses fue jugador de Estudiantes de La Plata, tuvo una buena participación dentro del campo de juego y fue campeón. Incluso, el ahora jugador del “Cacique” estuvo muy cerca de levantar dos títulos, aunque uno se frustró sobre el final.
¿Cómo juega el nuevo refuerzo de Colo Colo?
Lo primero que hay que destacar es que Colo Colo se reforzó con él para que la salida de Damián Pizarro que se unió a Udinese de Italia. Sin embargo, este jugador nuevo no tiene un estilo demasiado parecido, más allá de que ambos ocupan el frente de ataque.
Si bien tiene características importantes que no lo convierten en un nueve aferrado al área, no suele tener la habilidad en el uno contra uno del joven chileno. Si podemos encontrar en él una gran capacidad de asociarse con sus compañeros.
Esto es perfecto porque siempre se muestra como opción de pase y hace jugar a sus compañeros. En “El Pincha” se destacaba por su movilidad por toda la zona delantera y eso beneficiaba enormemente al equipo dirigido por Eduardo Domínguez.
Pese a esto, también tiene una faceta goleadora y un fuerte: el juego aéreo. Ha ganado muchas veces en el área rival, más allá de no siempre estar acertado con el arco. Y en el caso de que la pelota llegue por el suelo, siempre se las ingenia para estar mano a mano con los centrales e intentar quedar solo ante el portero.
En resumidas cuentas, es un delantero que hará jugar al resto del equipo más que hacer goles, pero puede ser vital para este once de Almirón. Si analizamos sus estadísticas en el cuadro argentino, podemos ver que jugó 28 partidos y en ese tiempo marcó 10 goles, uno de los promedios más altos de su carrera insólitamente, solo superado por lo hecho en Colón (13 goles en 29 juegos).
