Es sabido que el fútbol chileno no es el mejor pago de Sudamérica. Claramente ese lugar se lo lleva Brasil por muchísima diferencia, pero de cualquier manera es una buena idea analizar cuánto dinero promedio gana un jugador en el Campeonato Nacional y en el ascenso.
Hay algunos casos puntuales como el de Arturo Vidal que cobra un sueldo realmente alto debido a que Colo Colo así lo definió, son 114 millones de pesos mensualmente, los que suben el margen de ganancia a toda la competencia criolla. Pero si hacemos un promedio, la realidad del jugador del fútbol chileno es totalmente diferente.
El último mercado de fichajes entregó refuerzos de alto nivel y por ende, de alto valor de sueldos. Algo que clubes como los Albos deberán afrontar responsablemente, pero claro, con la espalda económica de la Copa Libertadores y los ingresos de los derechos de televisión.

El salario promedio del fútbol chileno
Históricamente los delanteros son quienes se llevan todas las luces debido a que son los que suelen convertir goles asiduamente. Es por eso que mensualmente suelen recibir entre 9,5 y 12 millones de pesos, dependiendo del club por el cual firme. Como los casos de Fernando Zampedri en Universidad Católica que renovó por 70 mil dólares, cifra a la que se acerca el atacante de la U, Leandro Fernández.
Si nos referimos al mediocampo, los jugadores del Campeonato Nacional suelen percibir unos 6,1 millones de pesos, aunque la cifra aumentó en las últimas temporadas y el promedio puede ascender hasta los 9 millones. En el caso de los premios por logros o minutajes, esa cifra mensualmente podría subir.
En un informe, La Tercera contó que los arqueros no sólo ocupan el lugar más sensible de la cancha y suelen ser los apuntados, sino que también cobran menos que el resto. Es por eso que el número de dinero bajó entre 2021 y 2022. Hoy en día reciben anualmente alrededor de 5 millones de pesos en promedio.

El salario de los jugadores de Primera B
Esa misma proyección puede ser más baja aún cuando revisamos los números de la Primera B, donde se ve una interesante diferencia porcentual. Por ejemplo, los atacantes percibían apenas 3 millones y en Segunda División Profesional el número se reducía considerablemente a solo 900 mil pesos.
Los mediocampistas del ascenso obtenían unos 3 millones, siendo una rareza que algunos jugadores del centro reciban más mensualmente que los delanteros. Finalmente, 2,5 millones eran para los defensores y poco más de 500 mil pesos para los defensores.