El delantero de Lanús le dio el triunfo a su equipo sobre la hora y de la manera soñada: de chilena y desde afuera del área. Una locura.
“El Premio Puskás de la FIFA se concede al autor del mejor gol anotado durante la temporada de fútbol profesional. Fue creado en honor y en memoria de Ferenc Puskás, capitán y estrella de la selección de fútbol de Hungría. Este premio fue instaurado en la temporada 2008/2009″. Así define Wikipedia a uno de los galardones más prestigiosos que se otorgan en el mundo del fútbol. A partir de ahora, también podrían incluir a Walter Bou en la descripción…
Es que el delantero que supo vestir la camiseta de Boca Juniors, Vélez Sarsfield, Gimnasia y Esgrima La Plata, Defensa y Justicia y Unión de Santa Fe acaba de hacer el mejor gol de la Liga Profesional de Fútbol (y eso que recién estamos en la fecha 9) y, posiblemente, el mejor del año a nivel general. Tal es así que en redes sociales ya están exigiendo que el actual jugador de Lanús sea candidato total para el famoso Puskás.
Video: el golazo de Walter Bou en Lanús vs Tigre
Lanús y Tigre nos regalaron un verdadero partidazo en La Fortaleza. Luego de los tantos de Eduardo Salvio por duplicado, Ramiro Carrera en contra y Florián Monzón, todo parecía indicar que el encuentro finalizará en empate 2-2. Pero apareció Walter Bou a los 44 minutos del segundo tiempo y, a través de una pirueta inédita y difícil de dimensionar, estableció el 3-2 final en favor de los locales.
Mateo Sanabria cruzó mitad de cancha, levantó la cabeza y asistió al 9, que picó a la espalda del primer marcador central del Matador. Recibió la pelota cerca de la medialuna del área, recepcionó con el pecho y controló hacia atrás. La jugada parecía no llevar peligro: estaba de espaldas al arco, rodeado de defensores y agotado tras correr 89 minutos. Y fue ahí que pasó lo extraordinario.
Walter Bou se imaginó el gol de su vida y lo hizo posible. Chilena desde afuera del área y de zurda, su pie menos hábil. La pelota salió con una fuerza y dirección inmejorable, por lo que se coló en el ángulo superior izquierdo de Felipe Zenobio, que siguió el recorrido de la número 5 con la vista. No había nada que hacer. Golazo de otro planeta y digno de Premio Puskás.
