El director técnico de la Academia fue sincero en el análisis de la derrota de sus dirigidos frente a Atlético Tucumán en el José Fierro.
En el marco de la decimotercera jornada de la Liga Profesional de Fútbol, el Monumental Presidente José Fierro se repletó para disfrutar de una nueva victoria de Atlético Tucumán. El equipo dirigido tácticamente por Facundo Sava se recuperó de la derrota sufrida ante Rosario Central en la fecha pasada, venció a Racing por 1-0 y se ilusiona con el título. Los de Avellaneda, por su parte, sumaron una nueva desilusión que pega fuerte.
Con este resultado, la Academia se quedó con 21 unidades y se alejó a 6 de Vélez Sarsfield, el gran líder que tiene el campeonato. Luego de haber sido una decepción en el clásico contra Independiente, en donde apenas igualó 0-0 tras jugar la mayoría del encuentro con un jugador más, los de Gustavo Costas nuevamente dejaron que desear en cuanto a lo futbolístico y se volvieron con las manos vacías del norte argentino.
La confesión de Gustavo Costas
“Nos falta esa intensidad… Correr cada pelota como si fuera la última de tu vida. Tenemos que volver a las raíces. Tenemos que lograr de vuelta aquella intensidad que tuvimos en el semestre pasado. Recuperar esas ganas. Nos faltó el hambre para ir por la pelota y meterla adentro del área. A este partido había que ganarlo. Era un partido decisivo“, señaló el director técnico de Racing en conferencia de prensa, dejando en claro su disconformismo con la actitud de sus jugadores.
Más adelante, sin embargo, Gustavo Costas reconoció que no se vieron superados por Atlético Tucumán y que podrían haberse llevado un resultado mejor si hubieran estado eficaces en ataque: “Ellos no nos generaron muchas situaciones de gol y no nos llevaron por delante, para nada. La que tuvieron fue por un error nuestro“.
El crudo análisis de Arias que hizo ruido en Racing
Arias, arquero, capitán y referente de la Academia, fue muy crudo en su análisis post partido y dejó una declaración que hizo ruido en el club. “Es difícil de explicar (la irregularidad). Ellos fueron más intensos que nosotros. Corrieron mucho más que nosotros. Y ahí está la gran diferencia. Cuando un equipo corre, mete y te empuja se nota. Hay que corregir muchas cosas. Ya no se puede tener más paciencia. Hay que empezar a tener resultados, porque dejamos pasar muchos puntos en el camino. Cuando los de arriba pierden puntos y nosotros no sabemos aprovechar la oportunidad, se hace muy difícil pelear cosas así”, reconoció.
