La T vivió su máximo momento de gloria en 1999, una temporada después de haber ascendido a la primera división del fútbol argentino. En Top Mercato te contamos cómo se forjó esta historia.
El Club Atlético Talleres de Córdoba se consagró campeón del Torneo Primera B Nacional 1997-98, lo que le dio la posibilidad de ascender a la máxima categoría del fútbol argentino. En su primer año no le sobró mucho: sumó 44 puntos en 38 fechas, lo que apenas le alcanzó para ser el 16° mejor equipo y no descender.
Esto quiere decir que solamente hubo 4 clubes peores que la T y, aún así, logró la clasificación a un torneo internacional. Insólito, pero real. Los cordobeses se metieron en la Copa Conmebol 1999 debido a que no podían participar los participantes de la Copa Mercosur 1999 (6) y de la Copa Libertadores 2000 (4). Además, hubo varias instituciones que desistieron de ir, como Gimnasia y Esgrima La Plata y Unión.
Así Talleres ganó la Copa Conmebol 1999

La invitación le cayó por una de las casualidades de la vida, pero Talleres aceptó de inmediato ya que se trataba de una competición internacional oficial organizada por la Confederación Sudamericana de Fútbol. Y esto cambió para siempre la historia del club y de toda la provincia de Córdoba.
Este torneo se disputó de forma eliminatoria a partir de los Octavos de Final. La T se enfrentó ante Independiente Petrolero, club de Bolivia, el cual representó una verdadera piedra en el zapato. La Ida se jugó en el Estadio Olímpico Patria de Sucre y fue goleada 4-1 para los locales, algo que prácticamente dejaba al borde de la eliminación al conjunto argentino.
Sin embargo, la historia fue otra muy distinta en el Chateau Carreras de Córdoba. El Albiazul se impuso por 3-0 gracias a los tantos de Ricardo Silva, José Luis Marzo y Fernando Oliva, lo que sirvió para enviar la definición a los penales. Allí, los de Ricardo Gareca no fallaron, convirtieron todos sus disparos y avanzaron de ronda por un resultado de 5-4.

En Cuartos de Final, Talleres se vio las caras con el Paraná Clube de Brasil y protagonizaron una llave más que pareja. Los dos ganaron 1-0 en condición de local y fueron a penales en el Estadio Durival de Britto e Silva de Curitiba. El “Tricolor” falló 3 de 4, por lo que le facilitó las cosas al conjunto cordobés, que se metió en la siguiente ronda.
Deportes Concepción de Chile era el próximo rival, ya en las Semifinales. La T siguió haciendo pesar su localía y se llevó el primer chico por 2-1; mientras que en la Vuelta sostuvo un 1-1 que le sirvió para alcanzar algo único e inimaginable hace unos meses. Talleres iba a disputar una final internacional.
¿Su contrincante? Sportivo Alagoano, de Brasil, que venía de dejar en el camino a Deportes Quindío, Estudiantes de Mérida y São Raimundo. El primer partido fue más que sufrido para los de Gareca, que caían por 4-1 y Rodrigo Astudillo, sobre el final, descontó para devolverle la vida al equipo (4-2). Eran solamente 2 goles de ventaja, cuando la historia pudo ser mucho peor.
El juego definitorio se disputó en el Chateau Carreras con más de 30 mil espectadores en las gradas. Fábio Magrão, mediocampista de la visita, vio la tarjeta roja a los ¡3 minutos de primer tiempo!, algo que no estaba en los papeles y notablemente favoreció la tarea de Talleres.
El Albiazul dominó los 90 minutos del partido y goleó 3-0 con tantos de Ricardo Silva, Darío Gigena y Julián Maidana, este último de forma agónica. De esta manera, obtuvo el primer título de su historia: ni siquiera había conquistado un campeonato a nivel local, pero tuvo éxito en el ámbito internacional cuando nadie se lo esperaba.

Pasaron 24 años de aquel torneo y sigue siendo la única estrella del club. No sólo eso: también es el único festejo que ha tenido el fútbol cordobés en general, ya que ningún equipo logró ser campeón en primera división.