El mercado de fichajes para Vélez ha estado marcado por días de intensa actividad y giros inesperados
Entre negociaciones, llegadas y salidas, Vélez vive un período de incertidumbre que podría tener un impacto significativo en su planificación deportiva para la temporada 2025. En sentido, la transferencia frustrada de Valentín Gómez al Cruzeiro ha capturado toda la atención, siendo un ejemplo claro de cómo las complejidades del mercado de pases pueden alterar el rumbo de un club y de un jugador.
Cuando parecía que la salida de Valentín Gómez era un hecho, con una oferta aceptada por parte de Vélez, la situación dio un giro de 180 grados. El central una de las promesas más destacadas del fútbol argentino, tenía todo encaminado para emigrar al conjunto brasileño por una cifra cercana a los 9 millones de dólares por el 90% de su pase, sin embargo, los cambios en las condiciones de negociación por parte de Vélez y las demoras asociadas llevaron al Cruzeiro a desistir de la operación.
Una operación que se derrumbó
Según reportó el periodista César Luis Merlo, Cruzeiro oficializó que Gómez que no será refuerzo del equipo. Pedro Junio vicepresidente del club brasileño, confirmó que la transferencia quedó cancelada de manera definitiva, las constantes idas y vueltas en las condiciones impuestas por Vélez generaron un desgaste considerable en las negociaciones, hasta el punto en que el Cruzeiro decidió retirar su oferta inicial.
Para Vélez esta situación representa un golpe tanto deportivo como económico, la venta de Valentín Gómez no solo hubiera significado un ingreso importante para el club, también una oportunidad para reestructurar el plantel con nuevos refuerzos. Sin duda de que el caso del defensor, expone algunos de los desafíos que enfrenta Vélez en su manejo del mercado de fichajes.
Cruzeiro tras evaluar el tiempo y los esfuerzos invertidos, optó por cortar de raíz las negociaciones, una decisión que podría generar dudas sobre futuras operaciones de Vélez en el ámbito internacional. Pero no todo es negativo, la permanencia de Gómez podría ser vista como un alivio para el entrenador y los hinchas, ya que retienen a un jugador clave para la defensa.