Apelando a la predisposición de todos en el club por la incómoda posición, así asumió el nuevo entrenador en la Ciudad Jardín.
Everton de Viña del Mar debe acomodarse rápido luego de las complicaciones que tienen en el inicio del Campeonato Nacional, la campaña no es buena y la eliminación de la fase nacional de Copa Sudamericana le dio el último golpe a Gustavo Leal. En una rápida movida de la directiva, contactaron a Mauricio Larriera, quien ya se hizo cargo del equipo.
“Venir a este desafío es un orgullo, tenemos que ayudarnos entre todos para conseguir los objetivos. Devolver a este equipo al sitial donde hace rato no está”. Fueron las primeras declaraciones del nuevo entrenador que ya debe debutar este viernes ante San Luis de Quillota. Además se presentó al equipo que lo acompañará; Pablo Placeres, Juan González y a la espera de un integrante más.
El entrenador asumió en un club que tiene una estructura valiosa, según dijo el uruguayo, agradeció la colaboración de los elementos y no solamente de los jugadores. Julio Barroso quien fue interino tras la salida del brasileño, entregó la información para poner al día a sus nuevos compañeros.
La misión es empezar a sumar puntos en todos los frentes
Mauricio Larriera asumió en Everton de Viña del Mar con la necesidad imperiosa de volver a ganar, tienen una victoria por Copa Chile frente a los quillotanos y en Campeonato Nacional sólo suman dos empates, con esos dos puntos están en zona de descenso. “Estamos en un lugar bastante incómodo, muchas veces se tiene que jugar como se pueda y no como se quiera, lo que hoy urge es ganar“, lanzó el uruguayo.
“No nos posicionamos como club en la zona en la que estamos, no debe traer nerviosismo, pensar en la permanencia sería totalmente demencial, pensamos en cosas más grandes”. Así calmó Larriera a los hinchas que están algo asustados con el mal arranque de los Evertonianos y apuntan a retornar a los torneos continentales.
Los primeros desafíos de Larriera
Este viernes, Everton visitará a San Luis de Quillota por Copa Chile, pero la próxima semana deberán recibir a Universidad de Chile, en lo que será el primer apretón del técnico uruguayo con los Viñamarinos.
