El “Burrito” confesó que habría logrado muchísimas más cosas como futbolista, pero cometió errores que no se lo permitieron.
No cabe ninguna duda que Ariel Ortega ha sido uno de los jugadores más talentosos de las últimas décadas en el fútbol argentino. Era especial, diferente. Tenía una gambeta indescifrable, un cambio de ritmo impactante y una inteligencia única para entender el juego. Lo disfrutaron River Plate, Valencia, Sampdoria, Parma, Fenerbahçe SK, Newell's Old Boys, Independiente Rivadavia, All Boys, Defensores de Belgrano y, por supuesto, la Selección Argentina.
El “Burrito” supo ser el 10 del combinado nacional en dos ediciones de la Copa del Mundo de la FIFA, algo que pocos pueden presumir. Tanto en 1998 como en 2002, se pronunció como uno de los futbolistas más destacados de la “Albiceleste”. Lamentablemente, se quedó con las ganas de trascender en este torneo: primero fue expulsado de manera infantil en los cuartos de final contra Países Bajos y nos condenó a la derrota; mientras que posteriormente no pudo evitar la eliminación en fase de grupos. Además, hay que recordar que fue el encargado de suplir a Diego Maradona en los octavos de final de 1994 contra Rumania y, aunque jugó a un gran nivel, fue caída 3-2.
El gran arrepentimiento de Ariel Ortega en su carrera

Ariel Ortega dialogó en una entrevista con Sergio Goycochea por D-Selección y reconoció que pudo haber tenido una carrera muchísimo más exitosa de la que tuvo. Si bien disputó más de 700 partidos entre clubes y selección, anotó 148 goles, dio 201 asistencias, ganó 11 títulos y estuvo nominado una vez al Balón de Oro (1998), está claro que el jujeño pudo haber sido más de lo que fue.
“Ahora con 50 años me pongo a pensar y creo que habría logrado más cosas si no me hubiera equivocado tanto. Para ser jugador de fútbol hay un solo camino y es el de ser profesional al 100%. Con 50 años digo que podría, no digo haber sido más jugador, sino haber logrado más cosas por no equivocarme. A los 25 cometía errores que ahora digo ‘qué tonto’. Me arrepiento de no haber sido más profesional”, confesó el “Burrito”.
Marcelo Bielsa, el que más marcó a Ariel Ortega

“Hay entrenadores que te dan más confianza y te hacen sentir más cómodo. Yo siempre digo que si hubiese tenido a Bielsa a los 20 años, seguramente hubiese sido otro jugador diferente. Uno tiene su talento, su impronta y su esencia, pero los entrenadores te marcan cosas que te llegan. A mí me ha enseñado movimientos y uno pensaba que sabía todo, pero no lo sabía todo. La forma en la que le llegaba al jugador y el respeto fue fundamental. Trataba a Bati con el mismo respeto que a un sparring. Quería que el tipo aprenda y querer llegarle. A mí me marcó mucho Bielsa”, reconoció el 10.