El lateral izquierdo de Dortmund fue el máximo responsable de la derrota en la final, sobre todo por su papel en el segundo gol.
Real Madrid se quedó con la decimoquinta Champions League en su historia, y amplió aún más su fantástico palmarés, con la victoria por 2-0 contra Borussia Dortmund en la final del torneo continental de la UEFA. Con goles de Dani Carvajal y de Vinicius Junior, se consagraron campeones y festejaron el tan ansiado trofeo frente al conjunto alemán. Los subcampeones se quedaron con las ganas de obtener su segunda Copa de Europa, y de cobrar venganza por la final que habían perdido en 2013 frente a sus eternos rivales de Bayern Munich.
La realidad es que Borussia Dortmund dominó ampliamente el encuentro, en cuanto a oportunidades claras, frente a Real Madird en la primera mitad. Hubo una situación insólita que falló Karim Adeyemi, además de varios contraataques y jugadas muy peligrosas que acabaron en nada. Perdonaron demasiadas veces al equipo español, que hay que decir que fue favorecido en algunas ocasiones por el arbitraje, y todos sabíamos lo que podía suceder: dejar al Madrid con vida era lo más peligroso que podían hacer.
El error de Maatsen en el gol de Vinicius
Dicho y hecho, al minuto 73 llegó el gol de Dani Carvajal, a través de un córner que entregó, innecesariamente, Ian Maatsen. El lateral izquierdo de 22 años tocó la pelota en un momento donde no debía hacerlo para darles el tiro de esquina que terminó en el 1-0. Eso no fue todo, porque tan solo unos minutos después, cometió un error letal al entregarle la pelota directamente al equipo contrario para vuelvan a marcar.
En la salida de Dortmund, Maatsen malinterpretó la jugada y le regaló la pelota a Jude Bellingham, que estuvo atento para aprovechar la oportunidad. El inglés no perdió tiempo y lo habilitó a Vinicius Junior, que entraba solo por la izquierda. El brasileño solamente tuvo que controlarla y alejar la pelota de su defensor, para pegarle con la zurda y meter el 2-0.
Con ese gol, estaba todo sentenciado. Incluso tuvieron una oportunidad clara para extender la ventaja, mientras que Dortmund tuvo poco y nada, más allá de un gol anulado por una clara posición adelantada, para mantener la ilusión. De esta forma, Vinicius compensó por una actuación irregular, al mismo tiempo que Bellingham hizo algo de mérito en un partido donde tampoco había participado demasiado, y Maatsen quedó señalado como el máximo responsable de la derrota.
