La llegada de Iker Muniain estaba encaminada pero se complicó con este nuevo obstáculo al que se enfrenta la dirigencia.
San Lorenzo estaba a punto de dar un golpe en el mercado de pases con la incorporación de Iker Muniain, el emblemático jugador del Athletic Bilbao. Todo parecía encaminado para que el mediocampista español se sumara al equipo de Boedo en las próximas horas, después de que las negociaciones avanzaran con rapidez y el club le ofreciera un contrato atractivo por 18 meses. Sin embargo, lo que debía ser un día de celebración para los hinchas del Ciclón se transformó en otro dolor de cabeza.
Este viernes, cuando se esperaba que Marcelo Moretti, representante del club, se reuniera con Muniain y su agente para cerrar los detalles del acuerdo, una noticia sacudió los cimientos de la institución. Fabricio Formiliano, un defensor que pasó brevemente por San Lorenzo sin disputar un solo minuto, elevó un reclamo formal ante la FIFA por una deuda que el club mantenía con él. La situación, que parecía menor en un principio, escaló rápidamente cuando la FIFA dictaminó una inhibición que impide a San Lorenzo realizar incorporaciones hasta que la deuda sea saldada en su totalidad.

La nueva inhibición a San Lorenzo que complica la llegada de Iker Muniain
El reclamo de Formiliano surge a raíz del incumplimiento en el pago de la primera cuota de una deuda acordada tras su salida del club en febrero de 2024. El uruguayo, que había llegado al Ciclón como reemplazo de Federico Gattoni, no logró jugar debido a una lesión y a la saturación de jugadores en su posición. Al no ser tenido en cuenta por Rubén Darío Insúa, decidió rescindir su contrato de mutuo acuerdo. Sin embargo, la falta de pago en tiempo y forma llevó al defensor a reclamar el monto completo, desencadenando así la sanción de FIFA.
El actual jugador de Universidad de Chile no recibió el pago acordado en 140 mil dólares con el club, que tenía 45 días para abonar. Debido a ese monto, el jugador, que no llegó a debutar en los 5 meses que permaneció en la institución, generó esta nueva complicación para el cuadro azulgrana. El club, que ya había avanzado considerablemente en las conversaciones con Muniain, se encuentra ahora en una situación crítica: no podrá inscribir nuevos jugadores hasta que resuelva su situación financiera con Formiliano.

Con un plazo límite que vence el 6 de septiembre, la directiva de San Lorenzo se enfrenta a una carrera contra el tiempo para evitar que esta inhibición trunque la posibilidad de sumar al español, quien se perfilaba como una de las grandes figuras para la próxima temporada. Este viernes hay un encuentro pautado entre Moretti y el entorno de Muniain. Hay acuerdo por el monto del contrato, pero habrá que ver cómo se resuelve la situación de la deud.a