La jugadora de Juventus se quejó sobre la brecha salarial entre hombres y mujeres en el deporte, y usó el ejemplo de su pareja.
Alisha Lehmann, una de las figuras más influyentes del fútbol femenino actual, ha demostrado que su impacto no se limita solo a lo que sucede dentro de la cancha. Con 17 millones de seguidores en redes sociales y una destacada trayectoria en el fútbol europeo, la jugadora suiza de Juventus ha aprovechado su notoriedad para abogar por causas que afectan a las mujeres en el deporte. Su compromiso con la igualdad de género y la equidad salarial la ha posicionado como una de las voces más críticas contra las disparidades que aún persisten en el fútbol profesional.
Desde su llegada a la Vecchia Signora, Lehmann ha denunciado la falta de reconocimiento y el trato desigual que reciben las jugadoras en comparación con sus colegas masculinos, algo que, para ella, ya no puede seguir ignorándose. Esto lo viene haciendo en múltiples ocasiones, pero sus declaraciones más recientes han tomado un giro personal. Lo decimos porque la futbolista ha comparado su situación con la de su esposo, Douglas Luiz, quien también juega para el club de la Serie A.
Alisha Lehmann sobre Douglas Díaz: “Gana 100 mil veces más que yo”
En esta entrevista, Lehmann reveló una diferencia que ha sido difícil de digerir: mientras ella lucha por un salario justo, su esposo percibe un sueldo que es muchísimo más elevado. La diferencia de ingresos entre ambos, a pesar de desempeñar roles similares en sus respectivos equipos, ha generado malestar en la jugadora. Lehmann no dudó en calificar esta situación como “injusta” y manifestó su frustración ante la disparidad que existe no solo entre ellos, sino en el fútbol en general.
Douglas Luiz, que cuenta con un salario de 8,5 millones de euros anuales, disfruta de un reconocimiento financiero mucho mayor que Lehmann, cuya cifra es significativamente menor, pese a ser una de las jugadoras más destacadas del club. “Es algo que me afecta porque soy mujer. Obviamente, el camino que tenemos por delante todavía es largo, porque quizás nunca haya una igualdad salarial. Tendrá que haber una voluntad muy fuerte para hacer un cambio en esta dirección“, expresó Lehmann.
Lehmann continuó con una comparación que pone todo en perspectiva. “No soy una estrella, soy una persona normal”, declaró. “Voy a casa, cocino, hago lo mismo que todos los demás. Después del entrenamiento, a veces le digo a Douglas que es injusto. Hacemos el mismo trabajo, pero él gana 100 mil veces más que yo“, reveló.
Lehmann ha aprovechado su plataforma en redes sociales no solo para visibilizar esta problemática, sino también para defender la calidad del fútbol femenino y romper con estereotipos. “Muchas personas que critican el fútbol femenino ni siquiera se han tomado el tiempo de ver un partido. Si lo hicieran, se darían cuenta de lo talentosas y apasionadas que somos“, dijo, resaltando la importancia de cambiar la narrativa en torno a las jugadoras.