Fenerbahce impuso un plazo límite para que el Xeneize acepte su última propuesta por el centrocampista, que no será modificada.
El futuro de Cristian Medina en Boca Juniors se ha vuelto una incógnita. Las negociaciones con Fenerbahce parecen estar cerca de romperse definitivamente, y la situación del mediocampista, quien lleva semanas entrenándose apartado del grupo principal, se ha vuelto un tema tenso dentro de la institución. Desde hace meses, Boca y Fenerbahce han intercambiado propuestas y contraofertas, pero el acuerdo parece cada vez más complicado.
Según trascendió, la oferta del cuadro turco, de aproximadamente 10 millones de dólares más 5 en bonos, parecía atractiva en cuanto a cifras. Sin embargo, el obstáculo no es el monto, sino las condiciones de pago y quién debería asumir los impuestos de la transferencia. Fenerbahce insiste en cumplir con el cronograma de pagos que propuso originalmente, mientras Boca ha solicitado un acortamiento de plazos y que los impuestos corran por cuenta del club europeo. Esta petición, al parecer, ha sido el detonante para el ultimátum que, en las últimas horas, lanzaron desde Turquía.
La venta de Cristian Medina a Fenerbahce está en peligro de caerse

Fenerbahce estableció un plazo límite de 3 días para que Boca acepte su última propuesta sin modificaciones. La advertencia fue clara: si Boca no responde positivamente antes del viernes, la transferencia se dará por caída. Esta medida de presión busca cerrar el acuerdo o, en su defecto, liberarse de una negociación que se ha vuelto desgastante. Por el lado del Xeneize, el presidente Juan Román Riquelme se muestra firme en sus condiciones y dispuesto a mantener su postura hasta recibir una oferta que cumpla con sus exigencias.
Para el joven volante, que sueña con dar el salto al fútbol europeo, la situación es frustrante. Medina había manifestado abiertamente su deseo de ser transferido y, tras solicitar no ser convocado para algunos partidos, fue apartado por el técnico Fernando Gago. Su contrato con Boca se extiende hasta 2027, pero las posibilidades de continuidad en el equipo se ven cada vez más lejanas. A pesar de que su salida generaría un ingreso importante para Boca, la directiva prioriza asegurar las condiciones óptimas para el club.

Medina, mientras tanto, continúa entrenando por su cuenta y esperando que las próximas horas traigan una resolución favorable. Si Boca no cede en sus demandas y Fenerbahce no muestra flexibilidad, el destino del centrocampista seguirá incierto. Con apenas 72 horas en el reloj, Boca deberá decidir entre aceptar los términos de la propuesta o correr el riesgo de que el mediocampista continúe apartado en el club.