River perdió el primer trofeo del año del fútbol argentino y Marcelo Gallardo no encuentra el camino a la victoria. Los hinchas lentamente empiezan a desesperarse, pero el equipo sigue sin arrancar de cara a la Copa Libertadores.
Marcelo Gallardo es un prócer para los hinchas de River Plate y por eso pidieron con mucho entusiasmo su regreso cuando Martín Demichelis fue despedido. Sin embargo, nada está siendo como creían los hinchas y eso empieza a generar dudas con respecto a la continuidad del Muñeco.
A diferencia de otros equipos donde rápidamente las críticas caen sobre el DT, en el Millonario apuntan directamente a los jugadores. Eso demuestra el cariño que le tienen a Gallardo, pero después de perder la final de la Supercopa Internacional comenzaron los cuestionamientos. Si bien no piden su cabeza todavía, creen que tiene que imponer cambios importantes en el plantel.
Lo que necesita Marcelo Gallardo para llevar a River a la gloria
Dos Copa Libertadores y otros 12 títulos son algunos de los pergaminos que Marcelo Gallardo consiguió con River a lo largo de su primer mandato. Pero ayer ocurrió algo inusual para este equipo que es que perdió la final, algo que pocas veces se había visto en los últimos años.
Está claro que el DT no encontró el equipo en sus primeros seis meses desde que regresó al club y ya no tiene excusa. Primero heredó la plantilla de Demichelis, pero ahora tiene a los refuerzos que él mismo solicitó incluyendo una buena cantidad de jugadores que vienen de ser figuras en la Selección Argentina.
El problema principal que tiene el Muñeco es que el equipo no genera juego y la mitad de la cancha es realmente un problema. Lejos está de ser aquel equipo entre 2014 y 2022 que corría permanentemente para asfixiar a su rival y que tenía una idea clara a la hora de atacar y apuntar al arco rival. Hasta ahora no logró encontrar su mejor forma ni con Santiago Simón, Nacho Fernández o Franco Mastantuono.
Por otra parte, la delantera también fue un problema para River debido a que Sebastián Driussi no ha marcado y ya empiezan a comparar su situación con la de Adam Bareiro. Facundo Colidio está desencontrado con el gol últimamente y Miguel Ángel Borja parece ser la única carta, pero aparece recurrentemente en este año.
Con este panorama, las únicas zonas del campo de juego que están medianamente bien para Gallardo es la portería, ya que Franco Armani regresó a su nivel y ha salvado al equipo en reiteradas oportunidades. La defensa también mejoró con respecto a meses anteriores, aunque Marcos Acuña dio algunas ventajas en el lateral izquierdo por su falta de dinamismo.
Con este panorama desolador, River necesita adaptarse nuevamente a la idea que Marcelo Gallardo tenía en su primer paso por el club. El DT debe trabajar para volver a darle alma a un plantel que parece desahuciado y sin encontrar la forma de lastimar.
En caso de que no lo logre para mitad de año, lamentablemente la mesa directiva tendrá que optar por cambiar la dirección y buscar alternativas de jugadores o incluso entrenadores. Lo único que mantiene cierta paz por ahora es que Marcelo Gallardo siempre tendrá una licencia y más tiempo que cualquier otro entrenador.
