San Lorenzo tuvo varias incorporaciones complicadas a lo largo de los años, y el delantero colombiano es el último de ellos.
No hay días tranquilos en San Lorenzo, y se volvió a confirmar esta máxima. Jaime “Chichi” Peralta, el delantero colombiano que había llegado en este mercado de pases, rescindió su contrato con la institución menos de 2 meses después de su arribo. Había sido mediante un préstamo desde Deportivo Cúcuta con cargo y una opción de compra por el 50% de su pase, pero finalmente todo terminó este martes debido a sus frecuentes ausencias a los entrenamientos.
Esto no fue todo, sino que al jugador de 20 años también se lo había visto recibiendo al plantel de Brasil en el hotel. Ya no había sido citado para la Copa Argentina contra Sportivo Las Parejas, donde el Ciclón pasó por penales, por ausentarse de un ensayo. Volvió a faltar, y tomaron una drástica medida desde la dirigencia, que ahora tendrá que acordar los detalles para que se vuelva a sumar al equipo colombiano.
Jaime Peralta rescindió contrato: otro refuerzo indisciplinado de San Lorenzo
Para algunos puede ser una mano demasiado dura la del club de Boedo, pero la realidad es que es posible que se les haya acabado las vías de acción. Miguel Ángel Russo, DT de San Lorenzo, ya lo había desafectado del partido por copa y planeaba darle menos rodaje en el equipo. Tras faltar de nuevo sin previo aviso, no había mucho más para hacer, y es entendible que se les haya agotado la paciencia.
Lo notable es que esta es lejos de la primera vez que un jugador de San Lorenzo exhibe una disciplina de este tipo. Lo que más rápido nos viene a la cabeza son los hermanos Óscar y Ángel Romero, los paraguayos que tuvieron una serie de peleas y malas actitudes que desembocaron en sus polémicas salidas. Entre ellas, pelearse en un vestuario, lesionar a su compañero Andrés Herrera, y también no presentarse en los entrenamientos.
Cristian Ferreira también tuvo una polémica salida después de, entre otras cosas, subir una foto con indumentaria de River, su ex club. Ricky Centurión, un jugador con innumerables incidentes, tuvo una tensa relación con el club donde solo jugó 12 partidos, y faltó a varios entrenamientos. Por último, el arquero Pablo Migliore se peleó con Jonatan Bottinelli allá por 2011, un incidente de tantos a lo largo de su carrera.